La aerotermia es una tecnología limpia que extrae gratuitamente hasta casi el 80% de la energía ambiental del aire.
La infraestructura aerotérmica se compone de diversas bombas de calor de última generación, diseñadas para dar refrigeración en verano, calefacción en invierno y, caso de ser necesario, agua caliente todo el año.
La aerotermia extrae energía ambiental que se encuentra en la temperatura del aire, incluso a muy bajas temperaturas, y la transfiere a los interiores o al agua corriente; y lo hace mediante un ciclo termodinámico que utiliza un gas refrigerante comprimido a muy bajas temperaturas, para extraer calor, aportando más energía de la que consume.
Ventajas de la aerotermia:
- Alta eficiencia , ya que consume menos energía que otros sistemas de calefacción tradicionales, con lo que supone de ahorro de costes.
- Es una energía renovable, recogida en el Código Técnico de la Edificación (CTE).
- Es sostenible, según la UE.
- No requiere casi de mantenimiento, es un electrodoméstico más.
- No produce combustión, ni humos ni residuos al no incorporar una caldera, y por ende es más seguro.
- La casa puede funcionar solo con electricidad, evitando la contratación de gas o combustible.
- Ofrece aire acondicionado y agua caliente de bajo coste.
- Instalación sencilla y salidas de calor combinables.
- Funcionamiento silencioso y menor consumo energético.
- Ofrece ahorro, seguridad y confort, amén de ser mucho más natural, limpio y sostenible.
Desventajas:
- Su coste inicial es más alto, aunque se puede amortizar con el paso de los años.
- Requiere de una unidad en el exterior de la vivienda.
Y yo me pregunto si con la vertiginosa e incontrolada subida de las tarifas eléctricas de los últimos meses, podría seguir siendo una opción interesante.
Además, en plena crisis pandémica – que dura ya dos años más lo que podría venir aún – tanto médica, como social y económica, con una inflación galopante, desconocida desde hacía años, las familias medias españolas serían capaces de arrastrar un gasto de esta naturaleza.
Y para más inri, un estudio del Instituto Vasco de Competitividad afirma, en la nota 59 de la página 36: “La aerotermia no se considera renovable al no alcanzar el COP (coefficient of perfomance), o rendimiento mínimo (4.5), salvo en condiciones de laboratorio”.
Esto se debe a que según el segundo principio de la termodinámica, es imposible extraer calor desde un cuerpo más frío a otro a mayor temperatura, sin gastar energía, ejemplificado en la paradoja del demonio de Maxwell.